La Gastronomía Oaxaqueña, Deleite Nacional

Uno de los atractivos por los que el turismo se siente atraído hacia Oaxaca es por la gran variedad de sabores: mole, tamales, chocolate, café, pan, tasajo, chorizo, tlayudas, quesillo, chapulines, y un sin fin de alimentos hacen la delicia de propios y extraños. Cabe recordar que la gastronomía oaxaqueña fue designada como patrimonio intangible e inmaterial del estado de Oaxaca. Las autoridades del sector turístico señalan que la gastronomía de la región es el resultado de dos tradiciones: la española y la indígena. Entre los platillos típicos están la gran variedad de moles, higaditos de pollo, tasajo, pozole mixteco, cecina, caldo de gato, salchicha oaxaqueña y arroz con chepil, y una gran variedad de tamales.

 La gastronomía oaxaqueña es muy especial, puesto que cuenta con platillos muy elaborados y excelentes para deleitar a chicos y grandes. Los mercados son la mejor manera de conocer la vasta gastronomía oaxaqueña. Además de los comedores del mercado "20 de Noviembre", por la calle Miguel Cabrera se puede accesar al corredor de las carnes asadas. Desde que el visitante entra a este centro comercial, las llamadas "comideras" se pelean por los clientes. A todos los llaman para que degusten lo más tradicional de la gastronomía oaxaqueña: los siete moles, caldos, frijoles con hierba de conejo o un chocolate de agua, atole o café, es lo que tiene más demanda. Tlayudas con tasajo o cecina enchilada; entomatadas con pollo; enmoladas; huevos al comal y carne frita en salsa, son algunos de los típicos platillos que aquí se ofertan. Las "comideras" llaman a las tortilleras con las manos en forma de aplauso, y cada cliente decide cuánto comprar. El pan también tiene un lugar muy especial en este mercado. Aquí se pueden encontrar todos los tipos de panes que se producen en los Valles Centrales. Pan amarillo, de yema o resobado es ofrecido para acompañar el humeante chocolate o el atole de panela.